‘Una vez tenemos la condición de la paz y la alegría en nosotros, podemos permitirnos vivir cualquier situación. Incluso en una situación infernal, seremos capaces de contribuir con nuestra paz y serenidad. La cosa más importante para cada uno de nosotros es tener algo de libertad en nuestro corazón, alguna estabilidad en nuestro corazón, alguna paz en nuestro corazón. Solamente entonces seremos capaces de aliviar el sufrimiento alrededor nuestro’. – Thich Nhat Hanh
Queridos amigos,
Nuestro corazón procura siempre, comunicarse con nosotros de la manera más amorosa posible. Su latido rítmico y constante se esmera en contactar con nosotros desde la Plena Consciencia. Cada uno de sus movimientos acompasa nuestra respiración. Cada una de nuestras emociones y sentimientos buscan refugio en él y claman, por ser atendidas, desde su confortable estancia.
Pero no siempre andamos DESPIERTOS.
No siempre nuestra Atención es Plena.
Y a veces, hacemos oídos sordos para no ocuparnos de ello.
Nuestras ocupaciones y distracciones pueden ser múltiples. Variadas. Y todas ellas suelen ir bien acompañadas de un discurso contundente que las excusa.
Un nudo en la garganta.
La voz debilitada.
Unas lágrimas en los ojos.
Cierta presión en el pecho.
Un retortijón en el estómago.
O una incontinencia sorpresiva, son, algunos de los recursos que utiliza nuestro corazón para llamarnos al orden. Para reclamar nuestra atención. Para que nos dejemos de tonterías y atendamos conscientemente aquello que realmente LE IMPORTA A NUESTRO SER.
Escucha, escucha… nos dice.
Queremos compartir algunas de las DIRECTRICES, que Thay, puso en nuestras manos al empezar:
· Mientras actúas en la sociedad, no esperes o reces para no tener dificultades. Sin dificultades, la arrogancia puede surgir fácilmente.
· Mientras meditas sobre la mente, no esperes o reces para no encontrar obstáculos. Sin impedimentos, el conocimiento actual no será retado o ensanchado.
· Mientras trabajas, no esperes o reces para no encontrar obstáculos. Sin obstáculos, el voto de ayudar a los demás no profundizará.
· Mientras desarrollas un plan, no esperes o reces para conseguir el éxito fácilmente. Con un éxito fácil, la arrogancia puede surgir fácilmente.
· Mientras interactúas con los demás, no esperes o reces para conseguir beneficio personal. Con la esperanza de la ganancia personal, la naturaleza espiritual del encuentro se reduce.
· Mientras hablas con los demás, no esperes o reces para no estar en desacuerdo con ellos. Sin desacuerdos, los aires de superioridad pueden florecer.
Y nuestro querido monje Phap Luu, también nos recuerda que seguir trabajando juntos y con buen humor es el primer gran éxito de la Gira.
Desde la organización, reconocemos que nuestro gran aprendizaje está siendo “LA ACEPTACIÓN”.
“Hoy es el día de hoy”.
“Estoy aquí porque quiero estar aquí”.
“Tu estás en mi y yo estoy en ti”.
Nosotros, ya queremos hacerlo todo bien, pero…
…Pero nuestras experiencias como organizadores no tienen límite.
Os pedimos disculpas si no hemos podido dar satisfacción a todas vuestras peticiones, pero no dudéis que la INTENCIÓN ES LA DE APRENDER CADA DÍA MÁS Y MEJOR.
Seguiremos escuchando a nuestro corazón.